Ley de quiebra y Fábricas recuperadas por los trabajadores

Ella es vanguardia. Siempre tiene una medida que dobla la apuesta y sale hacia adelante.
El proyecto de ley que impulsará la recuperación de fábricas quebradas, y que pretende modificar la ley de quiebra actual, es un salto de calidad completamente invisibilizado. Recorriendo los titulares de los principales diarios esta noticia no aparece. Lo que aparece es el carrito que busca promocionar el consumo de pescado, pero la noticia sobre la reforma de la ley de quiebra no.

En Página 12, Raúl Dellatorre dice:

Otro punto central de la nueva legislación es el referido a las indemnizaciones y créditos laborales diversos (salarios, vacaciones y otras remuneraciones impagas al momento del cierre). En la ley actual, el trabajador de la empresa quebrada sólo tiene derecho al 50 por ciento de la indemnización, y depende para el cobro de sus créditos de lo que se obtenga del remate de los bienes de la planta fallida. Remates que, por otra parte, no se destacan por su transparencia. Además, los trabajadores van detrás de los acreedores prendarios e hipotecarios en la “cola” para cobrar. La modificación que propone el Ejecutivo establecerá el derecho al cobro del ciento por ciento de la indemnización por despido, y habilitará al juez comercial a adjudicar en forma directa la planta a los trabajadores si éstos deciden hacer una oferta para la compra de la misma, constituyendo sus créditos como forma de pago.

Una medida esperada y que acentúa la política de gestión que Cristina Fernández de Kirchner viene impulsando para la promoción de trabajo genuino y la recuperación de la dignidad de los trabajadores, vapuleados por el neoliberalismo.
Sumemos al plan Argentina trabaja, a la ley para el trabajo doméstico, la posibilidad de contar con un marco legal para la recuperación de fábricas quebradas o vaciadas por sus dueños.

Ella es vanguardia absoluta ante una clase política mezquina, necia e impotente.
Siento un orgullo enorme de tener a Cristina como presidenta. No me vengan con que no la merecemos ni pelotas, la recontra merecemos y hay que defenderla más que nunca ante la misoginea eunuca reinante.