30/10/09

Burlando el laberinto a pura gestión




$180 por hijo para desocupados y trabajadores en el sector informal. Alcance de cinco millones de Niños... ¿Dónde está la polémica? ¿quiénes estan en contra?

Ojo, no todos los proyectos del espacio opositor buscaban este alcance. Algunos sectores hablan que también debe alcanzar a los hijos de familias de altos ingresos, lo cual parece una locura ya que volvería a expandir la brecha y no la acortaría.

En la blogósfera ya hemos discutido hasta el cansancio el tema del "clientelismo", y no vale la pena volver sobre un tema que preocupa a necios. Demagógico es decir que la ayuda social no debe discriminar entre ricos y pobres. Que el kirchnerismo sostiene la pobreza para conseguir votos. Eso es demagogia. La de los que integraron gobiernos que le descontarón el 13% a los jubilados y trabajadores, la de los que le incautaron los depósitos a la clase media, y ahora se arrogan una piel que no les pertenece.

La implementación de la asignación universal por hijo aprovechará la red de oficinas que la Anses tiene a lo largo del país. Los interesados en recibir el beneficio deberán presentarse ante la repartición más cercana con la partida de nacimiento de su hijo o hijos, el DNI y una declaración jurada del padre o progenitor que certifique que no tiene empleo en blanco. Una vez que el trámite haya sido aprobado, el interesado comenzará a recibir mensualmente el 80 por ciento del subsidio de 180 pesos –144 pesos– mientras que el 20 por ciento restante –36 pesos– se depositará todos los meses en una cuenta personal del Banco Nación. El beneficiario recibirá una tarjeta magnética y podrá retirar lo que se haya ido sumando en marzo del año siguiente: para hacerlo deberá demostrar que su hijo cumplió con el calendario de vacunación –en el caso de los menores de cinco años– o que terminó el año lectivo de manera regular. Martín Piqué

La medida de asignar recursos porque sí, sin ningún plan, no es la característica de CFK. Este dinero busca mejorar la calidad de vida de millones de niños en la Argentina. A través de la educación y la salud, y para ello el Estado destina diez mil millones por año. Una gran medida.
Mientras la oposición sigue discutiendo sobre las formas, sobre las alianzas, mientras pensaban cómo repartirse el cuerpo, como buenos carroñeros, el kirchnerismo sale hacía adelante, recuperando la inicitiativa que lo caracterizó.

Me viene a la memoría la respuesta de Leopoldo Marechal, frente al juego onanístico del laberinto borgeano: " de todo laberinto se sale por arriba".

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