Osvaldo Pepe tiene razón

El secretario de redacción de Clarín, Osvaldo Pepe, tiene razón:

"Tiene razón la Presidenta: los periodistas independientes vemos todo mal. Desde ya, nuestras disculpas por informar lo que su Gobierno no quiere que se informe."

Es verdad que él es un periodista independiente y nada tiene que ver con el grupo económico que lo contrató. Si el secretario de redaccón de Clarín, no habla de los hijos de Ernestina Herrera de Noble, de cómo transaron Papel Prensa durante la dictadura, no es porque no pueda, sino porque es independientes del Grupo, pero no tiene ganas de hablar sobre eso.

Y con más razón se entiende, que el periodista independiente no hable de los despidos en Clarín, ni de la falta de libertad sindical en el Grupo. Porque no es cierto que los periodistas independientes ven todo mal. Se opusieron a la recuperación de los fondos de pensión porque así lo pedía la república, lo mismo que la nueva ley de SCA. Nunca fueron presionados por el Oligopolio mediático para decir lo que dicen porque son independientes. A ver si lo pueden entender, mal pensados. El gobierno es el que no quiere ver, ni siquiera respetar, a esta prensa objetiva e independientes, que no hace lobby por tal o cual, que publica con el mismo ímpetu las noticias buenas como malas.

Desde cuándo se les puede ocurrir acusarlos de cínicos, justamente a ellos, que defendieron siempre el derecho a la libertad de expresión, aún de los que no pensaban como ellos. Porque los periodistas independientes siempre estuvieron a lado, de los perseguidos, de los que no tenían voz. Jamás opusieron su objetividad informativa en beneficio de intereses espurios o presiones empresariales.
Por eso es indignante que se los acuse, a boca de jarro, de mal intencionados y cínicos. Ellos son los defensores de la verdad, la objetividad y la libertad de expresión.

Por eso también nos sumamos a que se desagravie a semejantes valuartes del periodismo nacional que enfrentaron como colosos a la más sangrienta de las dictadura, se opusieron a toda pérdida de derechos laborales, y llevan como tradición el informar siempre, sin ocultamientos, y caiga quien caiga.