¿Se puso de moda criticar periodistas?

Apunten contra los periodistas, así titula Joaquín Morales Solá su columna en La Nación.

Ayer, Carlos Barragan en el programa 6 7 8 se refería al tema de los afiches que escrachan a varios periodistas del grupo Clarín, y analizaba su texto:
"¿Se puede ser "Periodistas Independientes" y servir a la dueña de un multimedio que está acusada de Apropiación de Hijos de Desaparecidos?"

Las preguntas que se hizo son interesantes. Nadie que pretenda afirmar encabezaría el texto con una pregunta, en segundo lugar tampoco hablaría de "multimedio", en todo caso diría "monopolio" y por último no se sostendría que está "acusada" sino que se afirmaría que es una apropiadora.

El tema de los afiches y ahora el miedo de Cobos, son instalados para mostrar la barbarie K. Desde Perfil se habla de blogueros que comandarían el escrache a Cobos. Clarín ya había adelantado que todos estamos financiados por Aníbal Fernández.

Y entonces Morales Solá dice:

"Es habitual en los últimos tiempos encontrarse con intelectuales y artistas (y también con periodistas)que se dicen cansados de un periodismo crítico de los Kirchner. "Todos se han puesto de acuerdo para hablar mal del Gobierno", se escuchó decir hace poco a un reconocido escritor argentino. ¿Por qué no se cansaron cuando los periodistas criticábamos a Carlos Menem, a Fernando de la Rúa, a Eduardo Duhalde y hasta a Raúl Alfonsín mismo, aunque en este último caso prevaleció siempre, es cierto, el natural cuidado de una democracia recién nacida? En realidad, aquellos fatigados confunden cansancio con coincidencia. Ellos están -y es su derecho- muy cerca del discurso del kirchnerismo, aun cuando les sea difícil unir discurso y realidad, a veces tan divorciados."

Morales sufre de olvidos graves, omisiones profundas y minimizaciones. De la Rua tuvo que renunciar por la presión de la gente en las calles. Duhalde optó por llamár a elecciones luego de la represión en el puente Avellaneda. Al finado Alfonsín, le hicieron la guerra desde todos los temas posibles, los malos y los buenos. Con Menem, fueron cómplices de todas las privatizaciones y entregas, y a partir de 1998, cuando la Argentina empieza a mostar signos graves de la recesión y la falta de empleo, optan por montarse en el caballito de la Alianza que abandonan rápidamente. ¿De qué habla Morales?

Adentrándonos en la nota leemos:

"La Argentina, en efecto, habita en el pasado. Ningún debate de los últimos meses ha llegado siquiera a la década del 80. ¿Qué hacía tal o cual periodista en 1976, 1977 o 1978? No hacíamos nada. Vivíamos bajo una dictadura y cada uno vivía de lo que podía y como podía."

Vamos Joaquín no sea modesto. Hablar de subversión, de extremistas, de criminales abatidos. Tomar el Té en Tucumán con el Jefe Bussi es hacer algo. Permítame recordarle lo contento que estaban con la marcha de la economía y la seguridad. Que ahora no le guste lo que hizo no quiere decir que no hizo, se entiende.

Morales Solá como le sucede a muchos periodistas confunden opinión con información. Libertad de prensa con libertad de expresión. Por eso reclaman para sí todo. Cómo vamos a criticar un periodistas, estamos atentando contra la libertad de prensa.

Bueno así es la democracia, yo puedo criticar desde la libertad de opinión, que no es patrimonio de los "periodistas", sino de todos. Con la misma libertad que desde los monopolios de comunicación llaman "yegua" a la presidenta de la nación, obviamente siempre en boca de un "ciudadano" pero que emiten gustosos.

Tranquilo Morales, no se ponga en víctima que le queda feo el traje. Tampoco hable de listas negras con sus "colegas perseguidos" porque nos recuerdan las verdaderas listas negras, en las que Uds y ninguno de los que son como Uds figuró nunca.