No entiendo nada

Pensé que Macri podía ganar en la primera elección pero no creí que retendría la jefatura; pero me sorprendió amargamente que no sólo ganara, sino que además mejorara los votos obtenidos en 2007.
Y digo que no entiendo porque al Jefe de gobierno reelecto lo votaron los mismos excluidos por él, los ninguneados, los insultados, los apaleados.
¿Los docentes que votaron a Macri piensan que son vagos? ¿Los padres que envían a sus hijos a colegios públicos, donde algunos todavía no tienen gas, o los baños son un desastres, o las paredes se caen al igual que los techos; o no tienen patio porque el patio de sus hijos lo ocupa una escuela privada con Nuestra señora de la paz de lugano, o la empresa de colectivos Dotta, como en Eva Perón y General paz, qué votaron?
¿Los insultados del parque indoamericano? Los vecinos de Lugano con la salita que fue puesta en marcha para Clarín y la Nación y sus repetidoras, ¿a quién votaron?

El resultado del Domingo es contundente e irreversible. Macri tiene cuatro años más para no hacer casi nada, y pasarse insultando a Cristina hasta el 2015.
Si prometió, prometió y prometió, y no cumplió con casi nada de lo que dijo, y así obtuvo casi un 48% de votos, ¿por qué tendría que hacer algo? Si el Hospital borda lleva dos meses largos (pleno invierno) sin gas y no le importa a nadie, porqué tendría que hacer algo. Por qué razón Macri invertiría en educación pública y gratuita, si subejecutando presupuestos, cerrando grados, ninguneando a docentes, padres y alumnos, sigue ganando. ¿Cuánto lleva parado el polo educativo de Saavedra? ¿Y los terrenos de directorio y murguiondo que siguen en manos del corralón cuando fueron destinados para la construcción de un polo educativo sur?

Nada importa, los 40 km de subte prometidos no importan. De la Rua e Ibarra en plena crisis construyeron más estaciones de subtes que Macri con el presupuesto más alto de la historia. Nada importa. Y por eso no entiendo. Tal vez porque no termine de entender cómo funciona el voto de la capital del país. Es muy loco creer que alguien pueda dar un "voto castigo" con el mismo látigo sobre su propio cuerpo.

Me sigue sorprendiendo Poliarquía, que otra vez fue la única encuestadora que se acercó al resultado final.

Espero que Cristina le pida a Filmus que dimita de una segunda vuelta. Con un margen tan estrecho me resulta imposible pensar que se pueda dar vuelta esta elección, ya que todos los votos tendrían que ir para el FPV. Imposible. Macri ganó y hay que aceptar el voto de la ciudad, aunque por lo menos yo no lo entienda ni lo comparta.
Este viernes comienza el receso escolar invernal, que los porteños y las porteñas tengan que votar otra vez es un problema para ellos. No les gusta mucho ir, se quejan porque tienen que votar; y eso es algo que tampoco entiendo cuando reclamamos una mayor participación.